domingo, 20 de abril de 2014

Mío

Antes de empezar este entrada, debo decir que esto que escribo no va dirigido a nadie en especial, más bien todo lo contrario, si no entiendes trataré de explicarlo de la forma mas sencilla: Lo que aquí escribo es mi pensar, como debería o me gustaría que fuera algo, en especial, es mi opinión sobre un hecho, un punto de vista, no tiene nada que ver con ningún personaje que exista en mi vida, o quizás sí pero pues... eso aún no lo sé, lee y descubre por que la confusión.

Muchas veces me he preguntado por qué soy cómo soy, pienso que la vida me ha enseñado algunas lecciones, otras tantas las he aprendido de mis padres, amigos y otras tantas de mi sistema familiar. 

Ahora pues es tiempo  que les comparta algo muy personal, algo que nunca había tenido el valor de expresar con las palabras tan bien escogidas.

Resulta que me gusta el romance, me gusta creer en el amor porque mi historia familiar esta llena de esas anécdotas que de solo recordarlas pienso lo afortunado que han sido. 

Comenzaré con mis abuelos paternos y trataré de ser breve, corría la primera parte de los años 40's, cuando mi abuela, regresaba en tren de Veracruz hacia el DF, viaje que duraba 12 horas en aquel entonces, cuando vío a un grupo de estudiantes, parecía que en cualquier momento la abordaría, pero ella se negaba a cruzar palabra cualquiera de ellos.  Pero ¡Oh sorpresa! cuando tuvo que pararse a estirar las piernas, un de esos estudiantes, se le acercó, no dijo nada y le dio la mano, le dio las buenas tardes y se retiró junto con el resto de los muchachos. 

Otra historia sería si mi abuela no hubiera extendido esa mano, cuando se alejó apretó fuertemente el papel que él le había dado, cuidándose de que su tía no viera lo que acababa de pasar. 

Sobra decir que el era mi abuelo, le dejo sus teléfono y empezaron a comunicarse, mi abuela por decisión de sus tíos ya que a ellos no les gustaba el pretendiente que tenía, la enviaron algunos años a otro país, inclusive cuenta la historia que otro hombre le había pedido matrimonio, pero fueron las cartas de amor de mi abuelo, que nunca dejó de mandar, las que terminaron de cautivaron su corazón... y regresó con el y se casaron en secreto. (y aquí entre nos, no sé si yo tenga talento, pero creo que mi gusto por escribir es un gusto heredado de mi abuelo Chucho).

Hablando ahora de mi otro abuelo,el materno, la verdad creo que jamás vi tanto amor en sus ojos como cuando observaba a mi abuela, aún a sus 80 y tantos años, la forma en la que la veía, el sabía que era el gran amor de su vida, su mirada era capaz de expresaba tal amor y devoción en sus cansados ojos verdes que de verlo no quedaba más que suspirar... y se estarán preguntando por que es otro gran romántico, es muy fácil, el día que el falleció lo último que hizo, con último suspiro, con las últimas fuerzas que su cuerpo perdía latido a latido lo que hizo fue besar en los labios a mi abuela. 

Insisto aunque queridos lectores crean que son pocos ejemplos ( podría escribir cientos más) lo que trato de expresar es que yo quiero eso, una historia de amor para mi, que sea mía, que libre batallas, que el tiempo se su aliado y no su verdugo, que sepa que estoy dispuesto a entregar mi último aliento en sus labios y a escribir mil cartas de amor si es necesario, que entienda que mi amor es más grande que sus pensamientos, que me entrego no solo en cuerpo sino también entrego mi alma, quiero amar y que me amen, quiero inspirar amor a quien nos vea, quiero que cuando leas esto, si eres tu por quien debo pelear, te des cuenta que una lágrima esta rodando por tu mejilla, y no de dolor ni tristeza, es una lágrima que representa la seguridad de que nunca volverás a sentir soledad, que en mi encontrarás un compañero de vida dispuesto a todo... hasta morir por ti.

LLega un momento en el que casi cumplo 30 años y a decir verdad, esta historia de amor que quiero vivir cada vez dudo más que la llegue a vivir, quizás me entrego demasiado, y ahora mi corazón afronta cada termino volviéndose un poquito mas duro, haciendo mi mirada más sería  y mi sonrisa menos sincera, me gusta creer que existes, que estas ahí, que siempre estuviste ahí en los mismos lugares, cerca de las mismas personas, y que si no nos vimos fue porque no estábamos listos a entender nuestro amor... 

No quiero perder la esperanza de que un día alguien llegará a mi puerta, ni siquiera con flores, ni regalos o una gran carta de amor, lo único que necesito es un pequeño pedazo de papel que diga: eres mío como yo soy tuyo.  

-E-

miércoles, 9 de abril de 2014

Necesito Fluir (Suspiro en un sueño parte 2)

¿Nunca les ha pasado que se sienten atrapados en momento? ¿que necesitan moverse? ¿avanzar?

Detesto sentir me así, sin ninguna locomoción, con tanto dentro de mi queriéndome impulsar hacia adelante, tanto sentimientos, tanta vida, tanto de mi que aún no comprendo. 

Lo peor, es que de alguna forma yo me puse en esta situación, ese pequeña voz en tu cabeza que te dice: no lo hagas, no digas nada, no seas terco; la ignoré, tenía que saber si era verdad lo que veía, lo que tu no te dabas cuenta, lo que tantos conflictos nos causó. 

De alguna forma me siento tan culpable de haber arruinado algo perfecto, no sabes la impotencia que siento cuando inclusive tú sabes que estando conmigo, no se ve un final en el horizonte, quizás no estas listo para un viaje tan largo, quizás sí, pero sé jamás disfrutarías el viaje pensando que lo que hubiera pasado si no dejabas en claro ese sentimiento que había ahí. 

Debo decir que me da miedo que te acostumbres a estar entre dos decisiones, es muy larga la espera y es muy poco el oxígeno en el planeta. 

Esta falta de locomoción en mi vida me hace sentir una especie de agonía, no puedo llorar por un desamor, no puedo reír por estar contigo, es efímero el momento, tan desesperante pues nunca he sido competitivo, no quiero perderte, pero el peso de la incertidumbre me asfixia.

Mi mente dice: corre aléjate, busca aire y mi corazón dice: quédate lo vale, lo que sentiste fue real, y todo lo que se hace real con el corazón prevalece y supera todo. 

Quiero empezar a moverme, no me importa si tengo que sufrir, no me importa que me hagan daño, tengo que caminar, no me importa si camino hacia ti o tengo que caminar en dirección contraria. 

No sé si poco o mucho me ha enseñado esta vida, pero la verdad es que siendo honesto conmigo y contigo, si tu decisión llega a dolerme, lo aceptaré,  pero no sufriré. Su tu eliges que yo tome otro camino no dudaré de tu elección y siempre recordaré el sendero que me llevó a ti.

¿Te preguntas por qué? es fácil, porque lo que siento por ti es algo más grande que yo, porque mi amor no es egoísta, porque mi amor no condiciona, porque mi amor es paciente aunque mi corazón no tanto, mi amor es capaz de producir más amor y porque mi Amor es

Te he dicho lo que siento por ti es amo tu sonrisa, amo tu felicidad, amo la tranquilidad de tu alma y tu corazón, amo la honestidad con la que vives, amo el valor de tus acciones, amo la forma en la que ríes, amo tus defectos y razones, por que eso es lo que te hace único, te lo digo ahora y lo podría repetir mil veces más. 

Quiero que no tengas dudas, quiero verte feliz de nuevo, quiero verte esa seguridad que te caracteriza, quiero ver como la alegría llena tus ojos, quiero que vuelvas a dormir profundamente, quiero que entiendas que esto es lo que siento por ti, por que te amo, estés conmigo o con alguien más. 

Lo que trato decir es que no hay que tener miedo en tomar una decisión por afectar a alguien, al final es mejor decir no y que se molesten con uno, que decir si y estar molesto con uno mismo. 

Pues ahora yo necesito fluir, ser parte del aire y liberar mis miedos, necesito fluir ser parte de la lluvia y limpiar mi alma y empezar de nuevo... tú y yo o primero tú.... y luego yo. 

-E-

Suspiro en un sueño.

Hoy desperté y en mi mente no había ni pies ni cabeza, la amarga espera de una resolución vuelve loca a mente. 

Pero dentro de todo ese caos veo algo de cordura, veo algo que si entiendo, cierro los ojos y vuelvo a soñar, ahí  es más fácil entender lo que pasa.

Sueño que me quieres sin dudas, sin segundos pensamientos, 
Sueño que dejo de ser una opción para ser tu prioridad. 
Sueño que me quieres tal y como soy, sin cambiarme, sin miedo. 
Sueño que mis alegrías son las tuyas, que compartimos no solo miradas. 
Sueño que tengo anhelos que ni siquiera sabía que tenia, pero gracias a ti los encontré. 
Sueño que que me quieres sin condiciones, como yo te quiero a ti.
Sueño que ya no tengo que vivir pensando en que este será el último beso que te daré. 
Sueño que nuestros pies se entrelazan en las noches cálidas y nos abrazamos en las noches frías. 
Sueño que no necesito de tu romanticismo para saber que me quieres. 
Sueño que podemos pasar horas sin hablar de nada o hablando de todo como siempre lo hicimos. 
Sueño que con ese mensaje que me enviaste donde estabas seguro de estar conmigo, que la distancia te había hecho entender eso. 
Sueño que contigo nunca más tendré que volver a empezar, por que tu eres el comienzo de mi vida.

Y entonces... 

Despierto solo en mi habitación, para saber que en algún momento, por más breve que fue, tuve todo esto y mucho, mucho más, y es cuando me pregunto... ¿lo volveré a tener?

Tan difícil respuesta querer descifrar los asuntos del corazón, pero con certeza sé, que no importa lo que elijas, yo encontraré paz en mi corazón.