domingo, 13 de febrero de 2011

De comunicación y de Seguridad

"En mi casa no hay nada prohibido, pero no vayas a enamorarte."

¿No sería hermoso poder llegar a esa simple frase en nuestras vidas?

Pero es tan difícil no encariñarse de una persona, a veces solo necesitamos una mirada aquellos que creemos en el amor a primera vista, o un acto tan simple como un beso, una caricia o una flor y caemos redonditos, sin poner la manos, nomas nos detiene el piso de sopetón.

Y cuando ya nos pegamos en la cara y estamos bien embelesados, empezamos a "regar el tepache", y todo por la falta de comunicación a la que estamos acostumbrados.

Yo en lo personal, cuando me interesa alguien tiendo a ser un poco distante, no me gusta mostrar vulnerabilidad, como diría una amiga: has que se enamoren primero, aunque ese no es el punto. A lo que voy es que empezamos a crear una nueva versión de nosotros mismos, una versión que pude estar muy alejado de quien en verdad somos.

Y no me refiero a que nos arreglemos de más cuando sabemos que vamos a ver a esa persona, más bien es cuando entramos en "modo pareja", es decir: me rio de todos sus chistes, cuando mi humor reguarmente es mismo que el de una vaca, le abro la puerta, cuando ni a mi abuela le ayudo a subir al auto, le pago la cena, el cine y la salida al antro, cuando la tarjeta de crédito esta que revienta la pobrecita.

Pero ¿qué tiene esto de malo? En realidad nada, el problema es que estamos comunicando algo que al final no vamos a seguir haciendo, porque con el paso de los días y de los meses nos daremos cuenta que todo era una farsa, y escucharemos el eterno: es que cuando lo conocí no era así el/ella era mas atento, me escuchaba, y bueno una sarta de cosas que creo que todos hemos escuchado alguna vez en nuestra vida.


Digo, siempre es lindo querer y tener atenciones para aquellas personas que queremos, pero hay que recordar que las atenciones tiene que ir con nuestra personalidad, si te gusta bailar invital@ a bailar, si te gusta salir planeen un viaje corto juntos para conocerse.

Y ya que por fin empezamos a conocer a las personas empieza la famosa inseguridad, que es algo asi como: hay es que es muy lindo me trata bien, pero no sé, algo tiene o es que pues esta linda, pero no sé, como que esta muy chavita.

Punto número 1. Si sabemos, pero no queremos afrontarlo

Punto número 2. Lo que significa sentirnos seguros es que nuestros sentimientos no irán en saco roto, queremos que sea como en banco, que crezcan, se estabilicen y después usarlos.

Y hay detalles como el fantasma del ex que terminan marchitado una relación, y lo peor de todo es que el o la ex ya ni figura en la vida propia de la persona en cuestión. Y sino es el ex es la mamitis o papitis que uno moriría por encontrar al partero para preguntarle como le hizo para no cortar el cordón umbilical, y sino, hay mil y un razones para sentir inseguridad de la persona con la que estamos.

Si queremos seguridad hablemos de ello, no dejemos que llegue a mayores, al punto de perder una relación o no llevarla al siguiente nivel, la responsabilidad es de dos al hablar y no caer en el: es que si me hubieras dicho esto, es que si hubieras hecho esto, porque la verdad es que nada mas da mucho coraje damas y caballeros que me leen que te digan eso. ¿A poco no?

Y si el hablar no funciona para dar seguridad; pues honestamente consiganse a alguien de seguridad privada, un guarda espaldas, centinela y vigilante para que los siga.
En mi caso, si doy seguridad es poco a poco, según la vaya sintiendo, es cuestión de principios, pero una ves involucrado, me entrego hasta que me duele. A veces parecería que la vida es como las inversiones, cuando arriesgas mucho ganas mucho, cuando arriesgas poco, ganas poco.
No lo niego a veces es bueno jugar a lo seguro, a lo que conocemos y a lo que necesitamos cerrar en nuestras vidas, también eso es sano.

Así que en resumen no importa si quieres arriesgar o no, si quieres jugar seguro o lanzarte a lo desconocido, solo recuerda que siempre te estas comunicando, y ten la seguridad de que alguien esta buscando lo mismo que tu.
Asi me despido por hoy

Con una luz de esperanza para el Amor
-E-

2 comentarios:

  1. Pues si bien la frase de inicio me transporta más a relaciones abiertas, de esas que únicamente dejan huella en el colchón, encuentro muy cierta la reflexión sobre la seguridad porque además, tendemos a montar un fuerte dispositivo de "no entrar" con cada nueva relación y como bien dices, una vez que liquidamos a los tecolotes que vigilan "regamos el tepache" porque ni espejeamos para ver si alguien nos sigue. En lo personal y reconociendo que quizá sea el motivo de mis fracasos, entrego desde el inicio lo necesario sin recordar viejas heridas porque, ¿no merece cada nueva persona una oportunidad sin la sombra de un mal amor?
    En fin...

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